Si estás buscando renovar el auto de tu empresa existen dos opciones para hacerlo, a través de un crédito o del arrendamiento. Estas son las dos principales formas de financiamiento, aunque su mayor diferencia es que en el crédito pagas por el auto, mientras que en el arrendamiento pagas por usarlo.

En esta ocasión te explicaremos un poco de ambos y cuáles son sus diferencias entre sí.

Crédito

Un crédito te da el derecho a disponer dinero que no es tuyo a cambio de un interés, pagando tanto el capital (dinero prestado) más los intereses en un plazo determinado en un inicio.

Entre sus características se encuentran:

• Los pagos mensuales se aplican a la hora de comprar el automóvil, el cual se adquiere cuando liquidas o terminas de pagar el crédito.

• Necesitas dar un enganche.

• El tiempo de financiamiento puede ser desde 6 hasta 60 meses.

  
  

Arrendamiento

El arrendamiento te permite adquirir un automóvil a través de un tercero, es decir una empresa se obliga a comprarlo para que tú lo puedas usar, durante un plazo acordado en el contrato a cambio de una renta que se establece desde un inicio. Generalmente al final de este contrato, el arrendatario tiene la opción de devolver el vehículo a la arrendadora o comprarlo.

Estas son algunas de sus características:

• Los pagos mensuales son la renta del automóvil

• Los pagos son más bajos que en el crédito automotriz

• Los plazos pueden ir desde 12 hasta 48 meses

• Al final del contrato puedes decidir si lo compras o lo renuevas

  
  

A simple vista puede parecer que no tienen muchas diferencias entre ellos, sin embargo, sí las hay. Y es que el arrendamiento puede traer más beneficios para tu empresa que los créditos, no solo porque no compras el auto y al final tienes la opción de decidir si te lo quedas o no, sino que tiene más ventajas para tu empresa:

• Rentas hasta 100% deducible de impuestos

• No pagas el I.V.A. por adelantado

• No ocupas tus líneas de crédito

• Evitas utilizar todo tu capital financiero

• No apalancas tu empresa

Como puedes ver, el arrendamiento es una gran opción para adquirir tus vehículos empresariales, sin la necesidad de realizar una gran inversión y obteniendo beneficios fiscales que ayudan a reducir gastos en tu empresa.

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